1 de febrero de 2011

Yo soy una masteriana

  
Noviembre 2010. Cata de vino: una clase animada
 
 
 ¿Masteriana? Si… así nos hacemos llamar, los estudiantes del Máster en Trastornos de la Comunicación del Instituto de Neurociencias de Castilla y León (INCYL) perteneciente a la Universidad de Salamanca.
 

Septiembre 2010. Las primeras semanas de clase
Más en detalle ¡Soy una terapeuta de Neurociencias! ¡Y qué orgullosa!

Pertenezco a la primera promoción de este máster, en un principio todo era malo no… ¡lo peor! presión, agobio, estrés, un año sin vida social se avecinaba… ¡Ey! después de unos meses he de decir, que no ha sido para tanto, lo que era malo fue tomando otro color, he encontrado mi lugar. A eso han ayudado 13 compañeras y un compañero, que hacen los días más entretenidos.
 El máster es de línea investigadora, y la verdad, que no se me había pasado por la cabeza el hecho de estar metida en un laboratorio experimentando con ratitas que nada tienen que ver con las batidas que le hago a mi hámster. Esto es otro nivel.

Como sigo sin entrar por el aro de la investigación (al menos por el momento, quien sabe que me deparará el futuro) tengo por costumbre adaptar las condiciones de mi entorno inmediato, en la medida de lo posible, a mis necesidades, y así estoy haciendo. Cuan importante es tener una base científica y conocimientos del sistema nervioso para conocer cualquier patología, buscar tratamientos y la mejor forma de intervención.

No voy a engañaros, no fue esa la causa por la que me metí en él, me introduje en este mundillo por recomendaciones (acertadas) de mi compañero de viaje Iván, por eso y porque no tenía nada mejor que hacer que seguir formándome y probar, y tal vez porque me encanta que me sigan llamando la “eterna universitaria” después de 2 carreras y este máster.
Ahora estoy en mi salsa. A casi todo (no podemos esperar encontrarle sentido a todo ipso facto. Actualmente empiezo a encontrar utilidad a cositas de mi primera carrera –Trabajo Social-, que fue digamos el primer plato) le veo sentido.

Y hablando de platos… el segundo plato fue lo que será mi profesión: mi 2ª carrera Terapia Ocupacional, y el postre el máster… pero a mí me gusta repetir postre… así que esto aun no es el final. Estoy segura.

En definitiva, me parece fundamental para todo profesional, que trabaje con cualquier colectivo en realidad, tener estos conocimientos. Si bien es cierto, que en el master nos centraremos en tres líneas: discapacidad visual, discapacidad auditiva y trastornos del espectro autista. No obstante, de cada tema saco mis propias conclusiones y aplicaciones a mi terreno. Es necesario además, que cada vez seamos más los que ampliemos nuestra formación, en base a nuestros intereses y no nos quedemos con una carrera de pan para hoy hambre para mañana. ¡Renovarse o morir!.

Sonrisas Terapeúticas :)


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.